¿No sabes cómo maridar de tus vinos? En este artículo salimos de dudas.
Cuando vamos a degustar un vino es importante saber como acompañarlo pero el maridaje es un poco subjetivo y puede variar dependiendo de la comida y la persona.
Tenemos que tener en cuenta las sensaciones que el vino y la comida nos reporta en cuanto a sabores (salado, dulce, amargo…), textura, aromas…
Por lo general se suele agrupar siguiendo una concordancia en base a colores, es decir, (blancos con pescados blancos, tintos con carnes rojas…), o por sabores (dulces con vinos dulces, pescados con espumosos…) entre otras.
Pero no olvidemos que los contrastes pueden ofrecernos grandes sensaciones, así que pon a prueba tu creatividad y elabora miles de combinaciones, el libro de los gustos está en blanco y, a veces, es necesario experimentar para descubrir nuevas asociaciones.
Estos son algunos de los principios básicos de maridaje:
- Un vino blanco como Blanco de Blancos acompañan bien con aperitivos, pescados y quesos grasos como camembert o queso de cabra.
- Un vino blanco seco como Castillo de San Diego son ideales para pescados blancos, quesos frescos, mariscos y ensaladas.
- Los vinos blancos semidulces como Maestrante, la botella de Barbadillo azul, acompañan muy bien con pescados y mariscos incluso con comida japonesa.
- Los vinos rosados como Alquézar Rosado de Bodega Pirineos suelen ir acompañados de verduras, quesos suaves, pastas y/o fruta.
- Los vinos espumosos como Barbadillo Beta presentan gran versatilidad para cualquier tipo de comida, su relación dependerá de si es crianza, reserva o gran reserva.
- Quadis Joven, un vino tinto de Cádiz compatible con las dos grandes bazas de la cocina: la carne y el pescado, además de setas o ibéricos.
- Los vinos tintos de crianza como Quadis Crianza son un buen acompañante de ibéricos, carnes a la brasa, guisos o quesos curados.
- Los vinos generosos como Manzanilla Solear, van genial con apaeritivos como langostinos o jamón, incluso con frutos secos y postres.
- ¿Quién dijo que el vino no va con un bocado dulce? los vinos dulces son un buen aliado para cualquier repostería.
No olvides qué…
Para las comidas grasas los vinos ácidos pueden hacer que la comida tenga un gusto más salado y el vino perderá acidez si se toma con comidas dulces.
Un vino tinto que tenga mucho grado alcohólico quita todo el sabor a la comida por lo que este vino es mejor con comidas fuertes.
Cómo veis, el vino, es un compañero de maridaje ideal para cada tipo de plato, desde salados a dulces, así que, te recomendamos que comiences a tomarlo de referencia para degustar tus platos preferidos.